El Clásico desde el Uni

por Daniel de la Mora

El torneo pasado tuve la oportunidad de ir al Clásico Regio entre los Tigres y los Rayados, fue un partido bastante malito con un 0-0 de bostezo. Sin embargo, este sábado decidí darles otra oportunidad y la verdad ha sido una de las experiencias futboleras mas gratificantes que me ha tocado presenciar.

Llegué 2 horas antes del partido como buen aficionado precavido (con mi playera Rayada, sin saber realmente las consecuencias que esto podría tener) , con el objetivo de encontrar el mejor lugar posible dentro del mar de Tigres. Al llegar, debo mencionar que la gente de amarillo se me quedaba viendo raro, como si fuera una especie loco o valiente (dependiendo del aficionado que me estuviera viendo) pero sin importarme eso, conseguí finalmente el "mejor" lugar disponible en ese momento, por ahí del tiro de esquina en la zona norte.

Primero salieron los Rayados, seguidos del "buuuuuuuuuu" más escandaloso que he escuchado en mi vida y posteriormente los Tigres hicieron su entrada triunfal despertando los alaridos de la multitud felina que coreaban sin cesar el "Ti-gue-res", si, leyeron bien; no Ti-gres, no no. TI-GUE-RES.

Después de varios minutos y patadas, "La Gata" Fernández marcó un gol que me dejó el ojo cuadrado y ahí empezó lo que parecía ser la debacle de los Rayados y de los aficionados albiazules que asistimos al encuentro. El Goooooooooooooooooooooooool más escandaloso que he escuchado en mis vivencias futboleras. Me atrevería a decir, que fue más ruidoso que un gol de las Chivas contra las Águilas o viceversa en el azteca, no podía entender como tanta gente podía gritar tan fuerte y aventar cerveza al mismo tiempo.

Después de ese momento eufórico, los Rayados controlaron el partido y minutos después Severo Meza me hizo sentir que mi boleto había valido todos y cada uno de los $250 pesos que pagué para asistir al famoso evento Norteño. Hace mucho tiempo no había visto un gol tan inesperado y espectacular, que hizo que la afición felina callara por completo. (Aparte, no se si compartan mi opinion pero, en cualquier estadio como que las jugadas se ven mas lentas no? Los disparos se ven como con la gloriosa "Phantom" y en los despejes parece que el balón se queda suspendido en el aire como 10 segundos). Para no hacerles el cuento más largo, el segundo tiempo fue completamente disparejo, con unos Rayados ofensivos y unos Ti-gue-res enjaulados en su área lo que me hacía sentir más tranquilo por el partido, pero mas nervioso e inseguro por los 35 mil compadres enojados que me rodeaban en ese momento. Al final del encuentro pude dar entre unos 4 y 5 aplausos de reconocimiento a los futbolistas y sin pensarlo salí corriendo del lugar antes de que las fieras tuvieran la oportunidad de atacar. Excelente experiencia, 100% recomendable para todos los aficonados que sigan o no sigan a estos 2 equipos del Norte.

P.D. En 2 semanas se juega en la misma cancha el Tigres vs América, sin duda, ahí estaré, pero.....¡Ay Nanita!